Pise el acelerador a fondo
Los años 60 fueron una década de experimentación, diversión, libertad y energía. Ya fuera a bordo de una motocicleta o acelerando un deportivo, vivir la vida a toda velocidad estaba a la orden del día. El fundador de la tercera generación, Willy Breitling, sintió este cambio de ritmo y se propuso diseñar un cronógrafo poco convencional que captara la energía de la época. Lo llamó Top Time.
Avanzando hasta hoy. Breitling se asocia con algunos de los nombres más originales del mundo del motor para crear sus diseños Top Time. Los relojes Top Time Classic Cars presentan los colores y emblemas de los coches deportivos de los años 50 y 60 en que se inspiran, y todos traen bajo el capó un motor, a elección, del que es imposible no presumir: el cronógrafo Calibre 01 de manufactura Breitling o el cronógrafo-tourbillon Calibre B21 de manufactura creado por La Joux-Perret.
Los coches de la colección